Los grandes escritores también (se) insultan
Podríamos suponer que los escritores clásicos o famosos, por el mero hecho de tener educación, cultura, formación o talento, serían con los demás y entre ellos mismos cultivadores de las buenas maneras. Craso error. Se entiende que el ego desmedido puede ser enemigo de las formas y, como consecuencia, hace que se desaten algunos excesos lingüísticos. En el gráfico que acompaña a este texto descubrimos los insultos y lindezas que espetaban unos autores a otros colegas sin atender a nombres ni currículos. Entre otros, la tensión se palpa en el “Eso no es escribir, eso es teclear” que Truman Capote dirigió a Jack Kerouac o la definición que Gustave Flaubert hacía de George Sand: “Una gran vaca llena de tinta”. El resto de insultos, y muy poco amor, en la infografía que sigue, elaborada por Aussie writer.
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