Charles Dickens, ¿por dónde empezar?
A muchos les asustan los clásicos, porque entienden que cuando la crítica, la tradición o la Historia, así, con mayúsculas, consideran un libro o autor un clásico lo que en realidad quieren decir es que es inaccesible, elevado y, también, aburrido. Aunque hay unos cuantos nombres que sí podrían encajar en esa definición, hay otros muchos que no lo hacen en absoluto pero que cargan injustamente con todos los prejuicios que el lector común suele atribuir a los clásicos.
Charles Dickens es uno de ellos. Admirado y venerado por estudiosos, expertos y gente seria en general, a menudo se olvida que fue en su día el equivalente victoriano a una estrella del rock. No sólo vendía a toneladas cada cosa que publicaba (habitualmente por entregas en publicaciones periódicas, las más de las veces editadas por él mismo), sino que hacía giras por teatros de todo el mundo abarrotados de lectores fervorosos que se congregaban para escucharle leer sus obras.
Hoy se cumplen 203 años de su nacimiento, y qué mejor homenaje que leer alguno de sus libros. Pero, ¿por cuál empezar? Margot Ajostiernos en su estupendo blog Crónicas en ferrocarril propone una guía de lectura muy apropiada para quien se adentre por primera vez en el mundo de Dickens. Ella aconseja comenzar por Canción de Navidad y David Copperfield, para seguir por Oliver Twist, Historia de dos ciudades, La pequeña Dorrit, Casa desolada… En su blog explica por qué este orden y habla más del resto de obras de Dickens y del autor.
Deja un comentario